China cumplirá su promesa de reducir las emisiones de gases de efecto invernadero

In Noticias, Política exterior by PSTBS12378sxedeOPCH

La XV Conferencia de la Convención Marco de Naciones Unidas sobre el Cambio Climático se realizará del 7 al 18 de diciembre en Copenhague, Dinamarca. El primer ministro chino, Wen Jiabao, asistirá a la conferencia. Hace un par de días, el gobierno chino anunció que para 2020, las emisiones de dióxido de carbono por unidad de producto interior bruto (PIB) se reducirán entre un 40 y 45 por ciento con respecto a los niveles de 2005, la proporción de combustibles no fósiles en el consumo de energía primaria se elevará a cerca del 15 por ciento, la cobertura forestal aumentará en 40 millones de hectáreas y el volumen de bosques en 1.300 millones de metros cúbicos. Todas estas medidas indican la firmeza del gobierno chino a la hora de enfrentar el cambio climático y asumir su responsabilidad como un país de grandes dimensiones.


En las últimas décadas, la tendencia del calentamiento global es cada día más patente y manifiesta. Bajo su influencia, los fenómenos meteorológicos extremos como la sequía, las altas temperaturas, grandes nevadas, etc., se reiteran con inusitada frecuencia. Las condiciones naturales son cada día más severas para toda la humanidad. El Convenio Marco sobre Cambio Climático de la ONU y el Protocolo de Kyoto, su documento adjunto, es el primer documento legal elaborado por la comunidad internacional para enfrentar el cambio climático. En la venidera conferencia a celebrar en Copenhague, se discutirá el plan de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero entre 2012 y 2020, y se intentará llegar a un acuerdo sobre un nuevo convenio internacional.

Tomando en consideración la trayectoria histórica y lo complejo del problema del cambio climático, el Protocolo de Kyoto ha definido el principio de responsabilidades comunes pero diferenciadas, es decir, los países desarrollados asumen la responsabilidad principal en la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero y fijan su meta concreta de reducción; los países en vías de desarrollo asumen voluntariamente compromisos de reducción de emisiones, pero sin fijar ninguna meta obligatoria.

El gobierno chino considera que la sociedad necesita un sistema económico sostenible que genere una producción elevada con una baja inversión, y que se caracterice por el bajo consumo y las bajas emisiones, a fin de dejar a las generaciones futuras un planeta donde puedan sobrevivir y progresar. La sociedad necesita transformar los patrones existentes de desarrollo y consumo y hacer avanzar el mundo hacia una vía de desarrollo caracterizada por la alta productividad, una vida próspera y un ambiente sostenible.

Un análisis de la industrialización llevada a cabo en los últimos 200 años mostró que la modernización de los países desarrollados, con una población de no más de 1.000 millones de habitantes, se alcanzó con un gran costo en recursos y en daños al ambiente de todo el mundo. Siendo el país en vías de desarrollo más grande del planeta, China enfrenta el reto de mantener el desarrollo económico y mejorar el nivel de vida del pueblo. Por eso, el punto de partida de China frente el cambio climático consiste en la adopción de nuevas tecnologías para elevar la rentabilidad energética y bajar el consumo energético por cada unidad de PIB. Según las estadísticas, hasta la primera mitad del presente año, el consumo energético por cada unidad de PIB ha bajado un 13% en comparación con el año 2005. E incluso, a pesar de la crisis financiera global, cabe destacar que la decisión del gobierno chino para enfrentar el cambio climático no se ha visto alterada, invirtiendo 210 mil millones de yuanes en la protección ambiental y ecológica.