El desarrollo paralelo: repercusión de la política Byungjin en Corea del Norte Rosa María Rodrigo Calvo | Licenciada en Estudios de Asia oriental, Máster en Asia Oriental: experta en China contemporánea y Relaciones Internacionales

In Estudios, Seguridad y defensa by Xulio Ríos

El 31 de marzo de 2013 Corea del Norte adoptó la política Byungjin, o de desarrollo paralelo, tanto militar como económico, durante una sesión plenaria del Comité Central del Partido. Kim Jong-un enfatizó que era esencial “dado el orden mundial actual” y especificó su significado como una doctrina para la construcción de “una nación fuerte y próspera en la que la gente puede disfrutar de la riqueza y esplendor del socialismo” a través del reforzamiento de la capacidad defensiva y de disuasión y centrándose en la aceleración de la construcción económica “de acuerdo con el estado de las cosas”. Según las directrices de esta política, se considera como una guía pragmática para maximizar el desarrollo económico y el nivel de vida de la gente mediante el refuerzo de las capacidades defensivas del país sin incrementar los gastos de defensa. Es importante la consideración de la doctrina Byungjin como la línea a seguir hacia la resolución de los problemas energéticos basándose en una industria energética nuclear independiente, el desarrollo de proyectos de reactores de agua ligera, el lanzamiento de satélites avanzados, incluyendo los de comunicación, la aceleración de la tecnología espacial y el reforzamiento de las capacidades de las armas nucleares. Asimismo, establece la confirmación legal del estatus de Corea del Norte como poder nuclear y su capacidad para incrementar sus fuerzas nucleares tanto en calidad como en cantidad hasta que le mundo se desnuclearice, entre otros puntos (Cheon, 2013).

 

(El texto completo, en el archivo adjunto).