Los buques de todos los países, incluidos los de los EEUU, gozan de plena libertad de navegación en el mar de la China Meridional. El rápido crecimiento económico en la región de Asia y el Pacífico, así como la expansión de la cooperación económica y comercial de EEUU con los países de la región, lo demuestra, ya que la misma habría sido imposible sin ese país.
Como señaló el historiador griego Herodoto, la gente confía en sus ojos más que en sus oídos, y son las acciones de EEUU las irresponsables; no las acciones de China.



Es EEUU el que está desplegando buques de guerra adicionales en el mar de la China Meridional, a la vez que efectúa ejercicios militares conjuntos con los países ribereños del mar la China Meridional, en un intento por demostrar su poderío castrense.



Es EEUU el que actúa como un matón de escuela, obligando a los países asiáticos a elegir entre él y China. Lo último que quisieran los países de Asia y el Pacífico es verse obligados a tomar partido entre EEUU y China.



Son aquellos que en EEUU quieren contener a China y prevenir la aparición de un rival a la hegemonía estadounidense en la región de Asia y el Pacífico, los que intentan crear tensiones y abrir una brecha entre China y otros países de la región.



Y es EEUU el que busca deliberadamente causar problemas sin razón, agitando las disputas de soberanía en la zona e insistiendo en la seguridad de la navegación, a fin de allanar el camino para la implementación de su estrategia para contener a China.



China se ha mantenido consistentemente adherida al principio de dejar de lado las disputas y fomentar el desarrollo conjunto de la zona, y ha cumplido su palabra con acciones. Este es un anatema para EEUU, por supuesto, que se rige por el principio de que gane el mejor.



Es fácil ver que EEUU está dispuesto a dejar que otros hagan el trabajo sucio por él. De ahí que los países de la región deban estar muy vigilantes contra sus esfuerzos de enturbiar las aguas.

Si se permite que EEUU agite las fricciones se perjudicará la cooperación regional y el desarrollo, y con ello los intereses de todos los países que bordean el mar de la China Meridional.