Las dos sesiones: reinventando el mero trámite

In Análisis, Sistema político by PSTBS12378sxedeOPCH

¿Cuánto han dado de si las dos sesiones de este año? No mucho. En resumen, muchos tópicos –tras mas de un lustro hablando del cambio del modelo de desarrollo- y pocas novedades, algo difícilmente evitable teniendo en cuenta la proximidad de la tercera sesión plenaria del Comité Central del PCCh –noviembre último- y que los “debates” estarían inevitablemente marcados por los ecos de aquellos anuncios. En tal contexto, la combinación de simbolismo y de síntesis en los mensajes explica la frugalidad de dichos eventos, a tono con la campaña anticorrupción y moralizante en curso, así como la insistencia en las consignas del momento en alusión a una agenda en la que sobresalen asuntos diversos (desde la participación privada en sectores antes reservados en exclusiva al Estado hasta los varios indicios de una mayor decisión para avanzar hacia la convertibilidad del yuan) con la rúbrica general de alentar, otra vez, un nuevo impulso al cambio en el modelo de desarrollo.

En este último aspecto, cabe destacar la insistencia del nuevo liderazgo en el destronamiento de la importancia de las cifras del crecimiento.  De hecho, hasta 22 provincias han decidido reducir sus objetivos en este plano, acomodándose a las nuevas tendencias. Pero no hemos sabido mucho más acerca de cómo se plantea llevar a cabo el impulso aprobado en noviembre, a la espera de su traducción en acciones decididas a instancias del Grupo Dirigente responsable de su elaboración.

Si los resultados de la votación del informe sobre la labor del gobierno fueran representativos de la correlación de fuerzas en las elites políticas chinas, habría que concluir que el sol sigue brillando intensamente en Oriente. En efecto, de los casi 3.000 legisladores, solo 15 votaron en contra y otros 5 se abstuvieron. Más del 99 por ciento a favor, un registro de los más altos desde 2006, aunque con un nivel de objeciones planteadas (101) también significativo. ¿Quiere esto decir que los sectores conservadores han renunciado a plantar a las ambiciosas reformas del primer ministro? Tras tan aparente unanimidad, quienes acusan de voluntarismo a Li Keqiang y su equipo, advierten de los riesgos para la estabilidad del país si la reforma se acomete con prisa. El mensaje ha sido, no obstante, avanzar, aunque el ministro de agricultura, por ejemplo, no dudó en frenar el entusiasmo de los gobiernos locales en materia de transferencia de tierras, instando a aplicar los cambios de forma gradual y ordenada a la vista de algunas prácticas indeseables. Por otra parte, la actitud decidida ante la corrupción debe ayudar a eliminar resistencias y obstáculos para las reformas (mientras seguimos a la espera del destino final del Gran Tigre).

Pese a todo, dos novedades cabría quizá mencionar. De una parte, una visibilización creciente de los grupos de interés, ya sea de carácter territorial, sectorial u orgánico, que aplican estrategias profesionalizadas cada vez más sofisticadas para la política china con vistas a satisfacer sus objetivos. De otra, la renuencia genérica al trato con los medios de comunicación, rompiendo la tendencia de convocatorias anteriores, conscientes sus señorías de que cualquier error puede salir caro a la vista del tono intimidatorio de Xi Jinping. Quien más quien menos, midió sus palabras y las “pasarelas” brillaron por su ausencia.

Igualmente, en el plano político, dos ideas cabría retener. Una, la incorporación cada vez más normalizada de la democracia consultiva al vocabulario del PCCh. Será por esa vía que espera insuflar savia nueva a un parlamentarismo de baja intensidad. Dos, la indisoluble asociación entre reforma y Estado de derecho, acentuando el mensaje de que la consolidación del liderazgo del PCCh debe arbitrarse por vía de la norma y no tanto del rito. Esta perspectiva exigirá tanto la mejora del cuerpo legal del país como una progresiva y controlada –y limitada- emancipación de la justicia de la tutela política,  un experimento de gran alcance que está dando sus primeros pasos.