(SPANISH.CHINA.ORG.CN) – Cada vez más mujeres chinas reciben asesoría sobre el acoso sexual en sus lugares de trabajo en los últimos años; sin embargo, muy pocas entre ellas recurren a los tribunales en caso de ser víctimas de estos abusos, según afirmaron varios expertos en derechos de la mujer durante un seminario en la capital china, Pekín, informe ‘China Daily’.

“Los casos de acoso sexual en el lugar de trabajo están creciendo rápidamente en los últimos años”, explica Guo Jianmei, una conocida abogada pública especializada en derechos de la mujer y la infancia. Guo es la directora del Centro Zhongze de Asesoría y Servicios Legales para la Mujer, con sede en Pekín.

Desde 2007, el centro ha recibido 183 consultas sobre acoso sexual y se ha ocupado de un total de 47 casos, entre los cuales el 34 por ciento están relacionados con el entorno laboral.

Según Guo, es un signo de que las mujeres chinas están tomando una mayor conciencia de sus derechos, y prefieren pedir ayuda en vez de soportar la situación en silencio.

En 2011, el fundador de un negocio de formación en Shenzhen fue sentenciado a una pena de prisión tras haber sido denunciado a la policía por violanción de una empleada. Luo Yun (pseudónimo) informó a la policía de que su antiguo jefe, Song Shanmu, la obligó a aparecer desnuda en fotografías y la violó. Tras el encarcelamiento de Song, varias empleadas más informaron de que habían sido también violadas o acosadas por Song.

Mientras las mujeres como Luo están mostrando coraje al denunciar tales casos, otras mujeres en la misma situación cuentan con un acceso más fácil a información legal y líneas de servicio telefónico, gracias a internet.

No obstante, Guo Jianmei reconoce en ‘China Daily’ que las mujeres que llegan a denunciar son aún una minoría. “Primero, las víctimas necesitan saber cómo pedir ayuda y dónde conseguir la información”, explica. Se refiere a un caso en el que una empleada doméstica fue violada varias veces por su empleador, con el resultado de varios abortos; la víctima no tuvo acceso a asistencia.

“En China, entre 100 y 200 millones de mujeres han sufrido o están sufriendo acoso sexual en sus lugares de trabajo, pero sólo muy pocos centros legales proporcional asesoría legal”, indica Guo.

Chen Wei, fiscal especializada en la protección de los derechos de la mujer en Ying Ke, un bufete de abogados de Pekín, cuenta en ‘China Daily’ que recibió varias llamadas solicitando consejo sobre casos de acoso sexual laboral, pero pocos clientes se atrevían a llevar el caso ante los tribunales.

Las clientes reculan porque temen que dichos casos se hagan públicos y se vean obligadas a dejar sus trabajo como resultado, así como tener responsabilizarse por el incidente.

Reunir evidencias claras sobre un caso de acoso sexual no es fácil, más aún cuando se trata de acoso verbal. “Es imposible llevar siempre encima una grabadora al trabajo”, explica Chen.

“La policía tampoco presta demasiada atención al acoso sexual”, denuncia Zhu Yantao, un ex alto funcionario del buró de investigación criminal del Ministerio de Seguridad Pública. “Nos centramos más en los casos relativamente graves como robos y explisiones, pero dejamos a un lado el acoso sexual en los lugares de trabajo”, afirma.