Las autoridades chinas publicaron hoy una regulación sobre los servicios de emisión en directo por internet, en la que se ordena a los proveedores de servicios y de contenidos que obtengan las cualificaciones pertinentes y se comporten de acuerdo con las reglas.

Para la transmisión en directo por internet de noticias, los proveedores de servicios están obligados a revisar el contenido antes de emitirlo, de acuerdo con la regulación dictada por la Administración del Ciberespacio de China (ACCh).

Los proveedores de servicios deben contar con el personal adecuado y tener la habilidad técnica para detener las transmisiones en vivo de inmediato, de acuerdo con la regulación, que entrará en vigor el 1 de diciembre de 2016.

La transmisión en directo por internet ha crecido rápidamente, pero se ha detectado que algunas plataformas han difundido pornografía, violencia, rumores, fraudes y contenidos contra los valores esenciales socialistas, lo que afecta adversamente a los jóvenes, señaló un funcionario del ACCh.

Algunas plataformas transmiten en vivo noticias sin las adecuadas calificaciones, por lo tanto, alteran la difusión ordenada de información, dijo el funcionario.

China tiene actualmente más de 300 compañías que ofrecen plataformas de transmisión en directo por internet, informó el funcionario.

Los proveedores del servicio deben clasificar las transmisiones en directo por internet con base en el contenido y el número de usuarios, y gestionarlas de manera correspondiente, estipula la regulación.

Se prohíbe que las emisiones en vivo socaven la seguridad nacional, desestabilicen a la sociedad, perturben el orden social, atenten contra los derechos e intereses legítimos de terceros y difundan contenidos obscenos.

No se permite el uso de servicios de transmisiones en directo por internet para hacer, copiar, emitir y diseminar información prohibida por las leyes y regulaciones, añade el documento.

La regulación también estipula que los proveedores de servicios han de poner a los usuarios que violen la misma, así como otras leyes y normativas, en una lista negra y prohibirles que se registren de nuevo.