La ciudad de Xiamen, en el sur de China, acogerá en septiembre de este año una nueva cumbre de los BRICS, que atisba ya en el horizonte su primera década. El lugar elegido, una de las primeras Zonas Económicas Especiales del país, parece sugerir el mensaje de la apertura y el desarrollo como claves esenciales en las que este grupo de países debiera apostar ante la adversa perspectiva que con sus planes proteccionistas sugieren otros actores internacionales relevantes.