--América Latina ha resistido mejor la crisis económica en buena medida gracias a la diversificación de sus intercambios comerciales y financieros con las economías asiáticas, entre las cuales China ha sido el principal motor de los últimos tres años, según dijo el viernes en Asunción, Ángel Gurría, Secretario General de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (la OCDE).
Durante el foro empresarial iberoamericano en la Cumbre Iberoamericana, que se inauguró ese día, Gurría pronunció el discurso «Hacia un comercio más sostenible y la inversión entre América Latina y China».
La relación de la región con el gigante asiático «ha cambiado mucho en los últimos años», dijo Gurría, al mencionar que los flujos comerciales y financieros han ido creciendo desde la década de los 90, de sólo $ 200 millones en 1975 a $ 40 mil millones en 2004. Dijo que en los cinco años anteriores a la crisis de 2008, el comercio aumentó de manera exponencial, coincidiendo con las tasas de crecimiento superiores al 5 por ciento en América Latina y en dos dígitos en China, «que por sí solas han contribuido a una cuarta parte del crecimiento del PIB mundial».
«Ha sido la crisis mundial la que aportó una nueva dimensión a esta relación y ha fortalecido los lazos entre ambas regiones, de manera definitiva», señaló Gurría.
Sostuvo que «mientras que las exportaciones a los Estados Unidos y la Unión Europea cayeron en un 26 por ciento y 29 por ciento, respectivamente, a Asia se redujeron en un 4 por ciento, y aún más sintomático es que las exportaciones a China crecieron hasta un 11 por ciento».
Dijo que «en 2010, las exportaciones latinoamericanas a China crecieron en un 51 por ciento, el doble de la tasa de crecimiento de las exportaciones totales, tanto interregionales como hacia el exterior de la región».
Las importaciones también aumentaron en un 48 por ciento el año pasado, 15 puntos porcentuales más altos que las de Estados Unidos y 20 puntos porcentuales más que en la Unión Europea.
El Secretario General de la OCDE dijo que América del Sur está a la vanguardia de la integración comercial con China, y que en la pasada década la firma de tratados de libre comercio ha permitido que el peso de China en la estructura de las exportaciones totales aumentara del 2 por ciento al 13 por ciento en Brasil, del 5 al 23 por ciento en Chile, y del 6 al 15 por ciento en Perú. «
Sin embargo, dijo que en la mayoría de los países de América Central y México «China representa menos del 2 por ciento de las exportaciones totales.
Esto refleja una mayor competencia en lugar de complementariedad en la relación comercial. «
Según Gurría, «el hecho de que América Latina y China se vislumbren como dos de los principales pilares del dinamismo global del desarrollo económico en los próximos años es una oportunidad para estrechar las relaciones.»
También dijo que «las reservas internacionales de China se podrían movilizar, por ejemplo, para apoyar las necesidades de América Latina en inversiones de infraestructura e innovación.»