"Esto interfiere groseramente en los asuntos internos de China, lastima los sentimientos del pueblo chino y perjudica las relaciones entre China y México", dijo el portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores, Ma Zhaoxu, en una declaración.
China expresó el sábado su fuerte descontento y oposición ante la reunión sostenida el viernes entre el presidente mexicano, Felipe Calderón, y el Dalai Lama.
«Esto interfiere groseramente en los asuntos internos de China, lastima los sentimientos del pueblo chino y perjudica las relaciones entre China y México», dijo el portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores, Ma Zhaoxu, en una declaración.
La parte mexicana arregló el encuentro entre Calderón y el Dalai Lama, haciendo caso omiso a la fuerte oposición y las quejas manifestadas de antemano por China, dijo el funcionario, y agregó que el Ministerio de Relaciones Exteriores de China y la embajada china en México han presentado ya quejas formales ante el gobierno del país latinoamericano.
El problema del Tíbet es un asunto interno de China, que tiene que ver con los intereses primordiales de China y con los sentimientos de su pueblo.
El Dalai Lama ha venido dedicándose a actividades secesionistas en nombre de la religión durante muchos años. China se opone enérgicamente a que cualquier líder o funcionario gubernamental extranjero se entreviste con él en cualquier forma, aseveró Ma.
«La reunión del líder mexicano con el Dalai Lama va en contra de los compromisos de la parte mexicana», aseguró Ma, y urgió al país azteca a adoptar «acciones concretas» para neutralizar el impacto negativo de la reunión y mantener un desarrollo saludable de las relaciones sino-mexicanas.