China desplazará en 2015 a la Unión Europea como segundo socio comercial de América Latina y el Caribe, aseguró el miércoles Alicia Bárcena, secretaria ejecutiva de la Comisión Económica de Naciones Unidas para la región (CEPAL). Agregó que los países emergentes se despegan de los países desarrollados, y que el gigante asiático superará a Europa en el comercio con la región, para situarse detrás de Estados Unidos. Respondiendo a una pregunta de Xinhua durante la presentación del "Estudio Económico 2010-2011", Bárcena recordó la reciente visita de Xi Jinping, vicepresidente de China, a la sede del organismo en Santiago, como una contribución al fortalecimiento de los lazos bilaterales.
China desplazará en 2015 a la Unión Europea como segundo socio comercial de América Latina y el Caribe, aseguró hoy Alicia Bárcena, secretaria ejecutiva de la Comisión Económica de Naciones Unidas para la región (CEPAL).
Agregó que los países emergentes se despegan de los países desarrollados, y que el gigante asiático superará a Europa en el comercio con la región, para situarse detrás de Estados Unidos.
Respondiendo a una pregunta de Xinhua durante la presentación del «Estudio Económico 2010-2011», Bárcena recordó la reciente visita de Xi Jinping, vicepresidente de China, a la sede del organismo en Santiago, como una contribución al fortalecimiento de los lazos bilaterales.
Xi pronunció un discurso dirigido a la región, en el que destacó que su país y América Latina y el Caribe deben ser socios económicos basados «en una cooperación de beneficio mutuo y ganancia compartida».
En esa ocasión, la CEPAL lanzó el documento «La República Popular China y América Latina y el Caribe: Hacia una nueva fase en el vínculo económico y comercial».
Al explicar el contenido del documento presentado hoy, Osvaldo Rosales, director de Comercio Internacional e Integración, dijo que lo que se busca «es que la región tenga una política activa, tanto a nivel de comercio, como de inversión».
Indicó que en cuanto a la inversión directa en la región, «hubo un salto importante en 2010 y no sólo en recursos naturales, sino también en algunos ámbitos de la industria. Está por ver si esa tendencia es permanente o es una inversión por una vez», acotó.
A su juicio, «las grandes reservas internacionales que acumula China y el reducido retorno que genera la tasa de interés y los papeles del Tesoro de Estados Unidos, hace que podríamos esperar más inversiones chinas en nuestra región».
Rosales reconoció que hoy la relación comercial se da «en términos que exportamos materias primas e importamos manufacturas de China, pero ciertamente uno no puede criticar a China porque esté importando nuestros productos».
Sostuvo que «el tema es qué vamos a hacer nosotros con los productos para crear, a partir de ellos, cadenas de valor y agregar innovación tecnológica, que permitan diversificar el grado de valor y agregar conocimiento».
Explicó que si la región no crea redes de nuevas tecnologías o masa crítica de recursos humanos, recursos público-privados invertidos en sectores tecnológicamente activos, «va a ser bastante obvio que la inversión china va a seguir dirigida a los recursos naturales».
Opinó que «con una mayor presencia en materia de inversión extranjera china, va a ser más fácil cambiar para un patrón más equilibrado en términos de los bienes que produce y exportamos a China, a fin de contar con un mayor conocimiento y valor agregado interno».
«De ahí que levantamos esos puntos en el documento, dada la necesidad de construir una agenda regional para establecer un mejor vínculo con China y el Asia Pacífico», precisó.
Por su parte, Osvaldo Kacef, director de la División de Desarrollo Económico, resaltó que «el comercio China-América Latina ya está llegando a alcanzar los niveles de Europa».
Expresó que «dada la situación de incertidumbre económica en Europa, China se va convertir de manera clara en el segundo socio comercial de la región en su conjunto», aclarando que «no ocurre lo mismo con las inversiones directas de China».
Kacef consideró que la presencia china con inversiones directas en América Latina y el Caribe «es un camino por recorrer de la mano del fortalecimiento del comercio bilateral».
«El desafío para nuestra región es replanear en alguna medida el tipo de relación que tenemos con China, para que no sea una relación desigual en el sentido de que nosotros sólo exportamos materias primas e importamos productos manufacturados», resumió.
En el estudio presentado hoy, la CEPAL pronostica que la región crecerá 4,7 por ciento en 2011 y 4,1 por ciento en 2012, en medio de grandes desafíos que afrontan los gobiernos.