QUITO, 16 dic (Xinhua) -- La cooperación y los lazos de China con Africa y América Latina y el Caribe, que cobraron fuerza en distintos foros en 2015, están encaminados al bienestar de los pueblos y no pueden ser considerados como neocolonialismo, coincidieron expertos ecuatorianos.
QUITO, 16 dic (Xinhua) — La cooperación y los lazos de China con Africa y América Latina y el Caribe, que cobraron fuerza en distintos foros en 2015, están encaminados al bienestar de los pueblos y no pueden ser considerados como neocolonialismo, coincidieron expertos ecuatorianos.
En entrevista con Xinhua, el ex viceministro de Relaciones Exteriores de Ecuador Marcelo Fernández, opinó que se trata de una cooperación en beneficio mutuo basada en intereses comunes.
«Esto del neocolonialismo depende por donde se lo mire. Actualmente eso ya está superado, yo no pienso que la cooperación de China en Africa sea un neocolonialismo sino simplemente una transferencia de cooperación mutua», sostuvo.
Según Fernández, «obviamente que hablamos de una cooperación de un país más fuerte, más avanzado, hacia un continente menos desarrollado», pero de ninguna manera puede ser visto como una amenaza.
«No es una cooperación que pueda considerarse una amenaza, porque se trata de una cooperación bilateral», apuntó.
Añadió que, en el caso de las relaciones con los países de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC), se trata de una cooperación Sur-Sur recíprocamente beneficiosa.
«China se ha convertido en el principal socio financiero de América Latina, mientras que esos países tienen importancia para China como proveedores de materias primas», anotó.
En ese contexto, desestimó que ese apoyo tenga la intención de perjudicar a terceros.
China y Africa acaban de celebrar a inicios de diciembre en Johannesburgo la Cumbre del Foro de Cooperación China-Africa (FOCAC por sus siglas en inglés), la segunda de su tipo de los 15 años de historia del foro.
En la cita, a la que asistieron unos 50 jefes de Estado y de Gobierno, se acordó elevar la relación al nivel de asociación estratégica de cooperación integral caracterizada por la equidad política y la confianza mutua.
En entrevista con Xinhua, el ex ministro de Relaciones Exteriores ecuatoriano, José Ayala Lasso, afirmó que la cooperación se da en el contexto del fortalecimiento de China como potencia económica y política.
«China, creo yo, está haciendo una política de penetración en otras áreas distintas a la económica y financiera, es una realidad; China pensó en todo eso como buenos orientales que son hace más de 20 años, y ahora están cosechando sus frutos», reflexionó.
Agregó que buscar la relación entre todos los países «es positivo» y que hay que apuntar a no depender de una sola nación.
«Hay que buscar ampliar los contactos con Europa, Estados Unidos, China, Africa, pensando en depender menos y ser en el fondo más autónomos en la toma de decisiones», apuntó.
El analista político y catedrático universitario Marco Navas, por su parte, sostuvo que el vínculo de China con Africa es similar al que se está encaminando con América Latina y el Caribe, al plantearse esferas de cooperación, relación y articulación económica más elevadas que la meramente comercial.
Con la CELAC, China celebró en enero de este año en Beijing el Primer Foro de Cooperación, lo que marcó una nueva era en la geopolítica global donde están surgiendo nuevos actores y nuevos polos de poder, opinó Navas.
«Hay un interés de China y de otras potencias emergentes en el sentido de tener más influencia ya no solamente en su entorno natural que sería Asia, sino en todo el mundo», sostuvo.
En ese sentido, razonó, se trata de «un correlato de la expansión económica que ya ha tenido China globalmente en el mundo y eso demanda que busque influencia política, no solo económica».
El Foro CELAC-China dejó como resultado un plan de cooperación 2015-2019, según el cual en 10 años ambas partes se esforzarán por realizar las metas de 500.000 millones de dólares en intercambios comerciales y 250.000 millones de inversión directa china en la región.
Además, se acordaron créditos especiales y preferenciales para infraestructura, becas y capacitación en China.
Según el canciller de Ecuador, Ricardo Patiño, el bloque regional y China tienen distintas fortalezas que son complementarias.
«América Latina llena de recursos naturales, de un nivel de crecimiento sostenido en el tiempo, de estabilidad política y, China, un país con una senda de crecimiento increíble, recursos financieros, desarrollo de ciencia, tecnología y talento humano», resumió.
Patiño resaltó que China tiene voluntad política para establecer una relación respetuosa.
«Lo ha demostrado en su manera de cooperar con los países latinoamericanos, esta no es condicionada, siempre con respeto», sostuvo.
Ecuador, que ejerce la presidencia de turno de la CELAC, considera a China como una «nación hermana del Sur», declaró recientemente el vicepresidente del país andino, Jorge Glas, tras una visita oficial a China.
«Las relaciones políticas y económicas China-CELAC alcanzan ahora su momento cumbre, si bien estamos alejados por la distancia, nos unen lazos de amistad y por supuesto complementariedades», señaló.
En 2014, el intercambio comercial bilateral alcanzó cerca de 270.000 millones de dólares. Glas dijo que en la última década se afianzaron las relaciones y catalogó a China como «un referente» de cómo la inversión en educación, ciencia y tecnología pueden transformar un país.
«En el contexto internacional somos 33 países (de la CELAC) que junto a China abogamos por un orden multilateral real, por el respeto a nuestras diferencias, por el reconocimiento a nuestra soberanía y libre determinación», indicó.
El II Foro CELAC-China se realizará en 2018 en Santiago de Chile.