La Conferencia Iberoamericana de Institutos Confucio en Sao Paulo, Brasil, se llevó a cabo este miércoles y jueves. En el evento, Xu Lin, directora general de la Oficina Nacional de Enseñanza del Chino como Lengua Extranjera (HANBAN) expuso cuál es el objetivo del Instituto Confucio en la región latinoamericana.
La Conferencia Iberoamericana de Institutos Confucio en Sao Paulo, Brasil, se llevó a cabo este miércoles y jueves.
En el evento, Xu Lin, directora general de la Oficina Nacional de Enseñanza del Chino como Lengua Extranjera (HANBAN) expuso cuál es el objetivo del Instituto Confucio en la región latinoamericana.
De acuerdo con la directora, los Institutos Confucio se han topado con muchas dificultadas en Iberoamérica, tales como la cualificación y el número de profesores, aunque también con oportunidades, dado que el interés por aprender mandarín está creciendo.
«Existe una gran demanda de los Institutos Confucio en los países latinoamericanos. En esta región, la enseñanza del mandarín llegó tarde . Queremos ofrecer cualquier ayuda para impulsar su difusión», destacó Xu Lin.
Frente a la creciente demanda del idioma, la mayoría de los Institutos Confucio en Latinoamérica carecen de materiales didácticos o profesores cualificados.
Sin embargo, la directora de HANBAN es optimista: «Después de ocho años de presencia en la región ya tenemos cierta experiencia. Estamos preparados para promover nuestro instituto. Planeamos otorgar becas para los interesados latinoamericanos que tengan ganas de irse a China a estudiar mandarín. Al regresar a su país, podrán trabajar como profesores del Instituto Confucio».
También la sede central del Instituto Confucio lanzará otro plan para dar ayuda financiera y contratar a los chinos que viven en el extranjero como profesores de medio tiempo, así crecerá el personal docente.
El Instituto Confucio es una instancia no lucrativa, cuyo objetivo es promover la lengua y la cultura china en todo el mundo. En Latinoamérica hay cinco institutos con cinco años de servicio.
En cuanto a los planes de desarrollo, Xu Lin explicó que todos los Insititutos Confucio deben establecer un plan para promover el desarrollo sostenible y elevar la calidad de los servicios. Para ello, buscarán convertirse en un instituto de gran aceptación entre la comunidad y las universidades, e integrarse a la cultura local.
Manifestó que con el esfuerzo, tanto de los chinos como de los extranjeros, el Instituto Confucio desempeña un importante papel para acercar a los habitantes latinoamericanos al mandarín y a la cultura milenaria de China, al mismo tiempo que se convierte en una plataforma a través de la cual los chinos conocen la cultura latina.
Por último, Xu Lin habló del intercambio literario entre China y la región latinoamericana.
«En la medida que los estudiantes extranjeros dominan el mandarín, su cultura, poemas y literatura tendrán más presencia en la sociedad china. Actualmente, la mayoría de los jóvenes en Latinoamérica tienen un conocimiento superficial sobre China. No es que no estén interesados por otros aspectos de este país, sino que no podemos ofrecerles más productos culturales. En el mercado hay pocos libros en español que hablen de China. Es un largo camino, tenemos que estrechar la relación entre esta nación y Latinoamérica. No olvidaremos la traducción de las obras chinas al español o al portugues», concluyó.