El presente artículo retoma la manera en que China ha sido estudiada durante los últimos años, se plantea la hipótesis de que a pesar de los vínculos entre las regiones, es un campo que falta mucho por explorar y, hasta cierto, punto lejano. Se parte de la idea de vinculación histórica a través de comercio y las olas migratorias, principalmente hacia América Latina. Sin embargo, el análisis se inicia en una revisión de la década de los sesenta, y la empatía del Maoísmo con algunos países de la región. Como un segundo momento, se inicia la nueva fase de la Sinología en Iberoamérica, a partir del fenómeno China a nivel internacional. Para ello, se propone un análisis mediante la teoría de Globalización aplicada a la región. Por último, señalan conclusiones que llevan a la idea de lejanía y de proceso de construcción de un acercamiento académico.