Según el informe anual de la Asociación China de Ciencia y Tecnología, gracias al remarcable progreso tecnológico que ha vivido el país en los últimos años, China ha conseguido desarrollar gran parte de la tecnología armamentística más avanzada del mundo.
El informe, que por primera vez incluye entre sus campos de investigación la tecnología armamentística, presenta un compendio de los avances más recientes que ha registrado el país en casi treinta campos científicos diferentes. En él se registran, además, posiciones de liderazgo del país en materia de armamento, proyectiles, información armamentística, y producción de artillería.
Según los datos presentados en esta materia, elaborados por la Sociedad de Artillería de China, el país ha desarrollado su propia tecnología y ha hecho importantes progresos en el campo del armamento pesado, como los motores diésel de gran potencia, así como en combustión rápida, tecnologías de alta presión y de refrigeración de altas temperaturas, las cuales juegan un papel crucial en el diseño de aviones de combate, portaviones y cohetes espaciales.
El informe explica, asimismo, que China ha desarrollado una serie de mísiles y cañones que mejorarán la capacidad armamentística del ejército, que en la actualidad continúa usando el equivalente al armamento más avanzado en la década de los 90 del siglo pasado, a la vez que ha mejorado muchísimo el área de tiro, la precisión y el impacto de sus armas, y ha hecho importantes progresos en lo referente a torpedos y cargas profundas.
Las tecnologías de automatización de la batalla, detección de objetivos y visión nocturna han alcanzado ya el nivel internacional, como permiten comprobar los altos estándares conseguidos en la manufactura del látex utilizado para la fabricación de mísiles y en la tecnología espacial.
Según el experto en armamento del a Universidad Nacional de Defensa de Beijing Li Daguang “el armamento ligero usado por las fuerzas armadas chinas se encuentra entre los mejores del mundo, pero sigue habiendo una distancia considerable entre la situación de China y los últimos modelos de tecnología naval y aérea a escala mundial”.
Por eso, China continúa a la sombra de las grandes potencias mundiales en la industria de armamento pesado como puede ser la fabricación de tanques, así como en el área táctica y de recursos derivados de la información, siendo todos estos elementos factores que están definiendo de forma crucial el perfil de la guerra en la actualidad. Sin embargo, está probado que a pesar de todo China ha avanzado en gran manera en la modernización de su armamento, tal y como muestra el detallado informe.
Por otro lado, los productores de armamento chinos han sido alentados a intensificar sus intercambios con los países extranjeros, a la vez que se es consciente, como apunta el estratega militar Wang Jinling, de que la táctica y las tecnologías de la información son más importantes para el ejército moderno que el simple poder de las armas. Según declaraciones del experto, “esta tecnología avanzada demuestra tan sólo la capacidad de producción de la industria militar china, pero no la fuerza del país en material militar”