BEIJING, 1 ago (Xinhua) — A 86 años de su fundación, el Ejército Popular de Liberación (EPL) de China se ha convertido en un poder relativamente moderno. Aunque China no pretende buscar la hegemonía, necesita un ejército fuerte para salvaguardar su desarrollo.


Hoy se conmemora el 86 aniversrio del establecimiento del EPL. Desde el 1 de agosto de 1927, el ejército ha experimentado años revolucionarios y beligerantes y un número de conflictos con los vecinos de China después de 1949.



Con sus 2,3 millones de elementos actuales, el EPL ha salido de los harapos para convertirse en poder fuerte correspondiente a las más de tres décadas de auge económico del país.



Ahora está equipado con un portaaviones puesto en servicio recientemente, en tanto que se está desarrollando otro armamento avanzado, que incluye un avión furtivo de combate J-20 y un gran avión de transporte militar.



El creciente poder militar del EPL ha provocado inquietud entre algunos de los países vecinos de China y en la potencia tradicional: Estados Unidos.



No obstante, en un periodo importante de oportunidades estratégicas, China todavía necesita un ejército más fuerte para salvaguardar su seguridad y los intereses nacionales cada vez mayores, para ayudar al país a lograr la modernización.



En un comentario publicado hoy, el Diario del EPL señala que la defensa nacional y la construcción de un ejército tienen un nuevo inicio, en el que enfrentan oportunidades valiosas y un ambiente de seguridad interno y externo complicado.



Desde que se instauró la política de reforma y apertura a fines de los 70, China ha dejado de ser un país cerrado. Por el contrario, su compromiso económico y cultural en el mundo ha resultado en una expansión de sus intereses en ultramar, sin mencionar los reclamos ilegales de los territorios de China que han hecho algunos países.



Al mismo tiempo, las complicadas condiciones nacionales han dictado que el EPL es necesario para múltiples propósitos internos, desde la ayuda en casos de desastres, hasta el mantenimiento de la estabilidad y la unidad nacional.



El gobernante Partido Comunista de China (PCCh) decidió en un importante congreso el año pasado que el país construirá una sociedad modestamente acomodada en una forma generalizada para el año 2020. Un ejército más fuerte puede servir como estabilizador y protector en este proceso.



El PCCh también impulsa el concepto de el «sueño chino», que se refiere a la gran revitalización de la nación china, así como una idea que inspire a cada individuo a lograr sus propias ambiciones a través de su esfuerzo personal.



A finales del año pasado, el presidente de China, Xi Jinping, dijo en relación con el ejército, que el sueño china puede ser un sueño de desarrollo de unas fuerzas armadas más fuertes. Añadió que una fuerte defensa nacional y un poderoso ejército son necesarios en el curso de construcción de un país próspero.



Un ejército más fuerte ayuda al desarrollo de China, y no es un recurso para que el país busque la hegemonía como las potencias nacientes en la historia. Los líderes chinos han reiterado en muchas ocasiones la promesa de que el país nunca buscará la hegemonía conforme fortalezca su poder.



En una recepción realizada el miércoles para celebrar el 86 aniversario, el ministro de Defesa Nacional de China, Chang Wanquan, declaró que China sigue con firmeza un camino de desarrollo pacífico e impulsa la cooperación militar con otros países para contribuir a la paz y al desarrollo del mundo.



«China seguirá inquebrantablemente una política de defensa nacional de naturaleza defensiva», afirmó Chang.