Esta decisión se tomó durante una reunión ejecutiva del Consejo de Estado (gabinete) celebrada hoy miércoles y presidida por el premier, Wen Jiabao.

Según un comunicado difundido tras la reunión, el gabinete también ha instado a los departamentos pertinentes a llevar a cabo inspecciones de seguridad y mejorar la gestión de las plantas nucleares que ya están en funcionamiento.

El comunicado subraya que todos los reactores en funcionamiento son seguros y que el país sigue sin verse afectado por la fuga radioactiva provocada por una serie de explosiones en la central nuclear japonesa de Fukushima, dañada por el terremoto de 9 grados en la escala de Richter y el posterior tsunami.

La fuga no afectará a la salud pública en China porque las partículas radioactivas se diluyen en el aire y en el agua, señala el comunicado citando a expertos nucleares.

«La seguridad es nuestra máxima prioridad a la hora de desarrollar plantas nucleares», afirmó el Consejo de Estado en el comunicado.

Todos los nuevos proyectos de plantas nucleares, incluyendo los que se encuentran en la fase de preconstrucción, quedan suspendidos hasta que se revisen y aprueben los estándares de seguridad, según el documento.

China cuenta en la actualidad con seis centrales nucleares en funcionamiento en las regiones costeras del este y el sur del país.

El Consejo de Estado también instó a las autoridades de protección ambiental y a la Administración Nacional de Seguridad Nuclear a reforzar la supervisión de sustancias radioactivas y emitir alertas en el momento oportuno.

La administración empezó a llevar a cabo un seguimiento de los niveles de radiación en todo el país el sábado 12 de marzo y ha estado publicando los resultados diariamente en su página web.

De acuerdo con el comunicado, China continuará ayudando a las autoridades japonesas a trasladar a los ciudadanos chinos que se encuentran en el país a un lugar seguro.