BEIJING, 30 oct (Xinhua) -- Las autoridades de Beijing han reforzado las medidas de seguridad y apoyo logístico de cara al XVIII Congreso Nacional del Partido Comunista de China (PCCh), que se inaugurará el 8 de noviembre.
El gobierno municipal inició hoy un programa de respuesta a emergencias al solicitar a los departamentos correspondientes que garanticen los servicios de agua, electricidad, gas, calefacción, transporte y control de incendios en este tipo de situaciones.
De acuerdo con el programa, los equipos de respuesta a emergencias deben restablecer el funcionamiento normal de todos los servicios en los 15 minutos siguientes a la declaración de emergencias, por ejemplo en fallas técnicas.
Los vehículos que transporten sustancias químicas tóxicas o peligrosas no podrán entrar en Beijing entre el 1 y el 18 de noviembre y la vigencia de los permisos para entrar en la capital china se reducirá de siete a tres días, de acuerdo con el buró municipal de administración del tráfico.
El departamento de bomberos de Beijing lanzó una campaña a mediados de octubre para eliminar los riesgos de incendio en la sede del congreso y los edificios del gobierno central, así como en hoteles, hospitales, escuelas, mercados, tiendas, cines, clubs y cibercafés.
Las autoridades de Beijing también han pedido a los trabajadores sanitarios que intensifiquen las inspecciones en hoteles y restaurantes para garantizar la limpieza y la seguridad alimentaria.
«Los servicios deben estar garantizados en cada puesto y sección para asegurar el éxito del congreso», dijo Guo Jinlong, secretario del Comité Municipal de Beijing del PCCh.
Los trabajadores callejeros o los jubilados locales han sido movilizados para ayudar a mantener el orden y la seguridad antes y durante la reunión.
Con un brazalete rojo que dice «patrulla de seguridad», un fotógrafo de apellido Chen busca algo interesante cerca de una canasta gigante de flores instalada en el centro de la Plaza Tian’anmen, sitio obligado de visita para muchos turistas.
«He estado tomado fotos de turistas durante cinco años, y deseo ser voluntario de seguridad», comentó Chen. «Con este brazalete, estoy autorizado para impedir malas conductas entre los turistas», dijo.
Los voluntarios pueden encontrtarse en muchos cruceros importantes.
Yang Liping, de 56 años de edad, se ha dedicado al voluntariado por un año, luego de su jubilación.
Además de un brazalete rojo, Yang porta un chaleco y un sombrero rojos. En la espalda del chaleco tiene un letrero que indica que ella pertenece a la Asociación de Voluntarios de Seguridad de Beijing.
«Es un honor ser voluntaria, porque puedo hacer algunas cosas útiles para la sociedad, como patrullar alrededor de las salidas del metro y ofrecer ayuda a quien la necesite», añadió. Los policías han sido apostados en sitios importantes como la Plaza Tian’anmen y en pasos subterráneos cercanos.
Personal de seguridad solicitó a un turista de apellido Lu en la plaza su identificiación e hizo una revisión en su mochila.
«No me importa para nada (la revisión), y entiendo completamente su trabajo», dijo el hombre de 32 años de edad, originario de la ciudad oriental china de Wenzhou. «Después de todo, están aquí para la seguridad de todos».
El XVIII Congreso Nacional del PCCh se realizará el 8 de noviembre, cuando más de 2.000 delegados del PCCh participarán en la sesión, la cual se lleva a cabo cada cinco años.
Una nueva dirigencia del PCCh será elegida durante la reunión, estableciendo una nueva dirección para el desarrollo del país en el futuro cercano.