BEIJING, 21 dic (Xinhua) — La Conferencia Central de Trabajo Económico se ha celebrado en Beijing del miércoles al viernes, y en ella los líderes chinos han trazado el camino para la economía en 2019, un año clave para que el país logre su objetivo de construir una sociedad moderadamente próspera en todos los aspectos para 2020.
En un discurso en la conferencia, Xi Jinping, secretario general del Comité Central del Partido Comunista de China (PCCh), presidente chino y presidente de la Comisión Militar Central, revisó el trabajo económico del país en 2018, analizó la situación económica actual y organizó los trabajos económicos para 2019.
China se ha enfrentado de manera efectiva este año con los cambios profundos en el entorno externo, ha respondido a los desafíos con un trabajo sólido, ha alcanzado los objetivos de la regulación macro en relativa buena medida y ha empezado con paso firme las tres duras batallas contra los grandes riesgos, la pobreza y la contaminación, según un comunicado difundido después de la reunión.
Mientras tanto, el país ha profundizado en la reforma estructural por el lado de la oferta, impulsado la reforma y la apertura con mayores esfuerzos, abordado adecuadamente las fricciones económicas y comerciales con Estados Unidos, mejorado el bienestar del pueblo y mantenido un desarrollo económico sostenido y saludable, así como la estabilidad social general.
El país ha «dado nuevos pasos hacia el logro de la construcción de una sociedad moderadamente próspera en todos los aspectos», indicó el comunicado.
«Los logros que hemos alcanzado no han sido fáciles», afirma.
Durante el año pasado, los funcionarios dirigentes han comprendido mejor cuál ha de ser la acción económica en las nuevas circunstancias, de acuerdo con el comunicado.
El texto señala que el país debe defender el liderazgo centralizado y unificado del Comité Central del PCCh; evaluar las circunstancias actuales desde una perspectiva a largo plazo y tener una visión clara de las prometedoras perspectivas de desarrollo a largo plazo del país; establecer una precisa regulación macro, ajustar activamente las políticas y mejorar su coordinación; responder oportunamente a las preocupaciones de la sociedad y canalizar las expectativas del mercado de manera específica, así como dar rienda suelta a la iniciativa de todas las partes para crear sinergias.
«Si bien reconocemos plenamente los logros, debemos ver que hay sucesos nuevos y preocupantes aunque el funcionamiento económico sea generalmente estable. El ambiente externo es complicado y severo y la economía se enfrenta a una presión bajista», advierte el comunicado.
Sin embargo, el escrito considera estos problemas parte del desarrollo, y señala que China todavía está y seguirá durante largo tiempo en un período con importantes oportunidades estratégicas para su desarrollo.
El mundo está enfrentando cambios sin precedentes en un siglo, lo cual genera tanto desafíos como oportunidades, señaló el comunicado.
Con el fin de convertir la presión en ímpetu para un desarrollo de alta calidad, China debe acelerar la optimización y modernización de su estructura económica, fortalecer la capacidad de la innovación tecnológica, profundizar la reforma y apertura, acelerar el desarrollo verde, y participar en la reforma del sistema de gobernanza económica mundial.
Asegurar un trabajo económico sólido es especialmente importante para el 2019, año en el que se celebra el 70° aniversario de la fundación de la República Popular China y es clave para la construcción de una sociedad moderadamente próspera en todos los aspectos, indicó el comunicado.
China fortalecerá los ajustes contracíclicos en su política macro, seguirá implementando la política fiscal proactiva y la política monetaria prudente, realizará ajustes preventivos y afinará las políticas en los momentos apropiados, y asegurará una estable demanda agregada, señaló el comunicado.
Se deben tomar medidas más audaces y más efectivas para implementar la política fiscal proactiva, con recortes en impuestos y tarifas en mayor escala y un aumento relativamente sustancial en la emisión de bonos gubernamentales locales de propósito especial, agregó.
China mantendrá una política monetaria prudente «ni demasiado ajustada ni demasiado floja» a la vez que mantiene la liquidez del mercado en un nivel razonablemente amplio, indicó el comunicado.
Los mecanismos de transmisión de la política monetaria se suavizarán aún más y la proporción de financiamiento directo se aumentará para hacer que la financiación sea más accesible y asequible para el sector privado y las pequeñas empresas.
Las reformas en diferentes ámbitos, entre ellos las empresas de propiedad estatal, impuestos y financiamiento, tierras, acceso al mercado y gestión social, serán impulsadas, y el ambiente institucional será mejorado para alentar una competencia justa y facilitar el desarrollo acelerado de las pequeñas y medianas empresas.
Se deben elaborar políticas sociales para ayudar a los más necesitados, mientras que se priorizará el empleo, apuntó el texto.
China se debe apegar a la reforma estructural del lado de la oferta para abordar importantes problemas económicos y recurrir más frecuentemente a los medios orientados hacia el mercado y basados en la ley, indicó el comunicado.
Los ajustes estructurales previos deben reforzarse, con esfuerzos continuos para reducir las industrias saturadas, reducir todo tipo de cargas comerciales y canalizar más impulso hacia áreas débiles como la infraestructura.
Se aumentará el estímulo a las entidades de mercado micro con el establecimiento de reglas de mercado justas, abiertas y transparentes y un ambiente de negocios basado en la ley, señaló el documento.
China trabajará para promover la innovación tecnológica y alentar nuevos conjuntos industriales, construir un sistema de mercado unificado y abierto con una competencia ordenada, y alentar al sector financiero para que sirva mejor a la economía real.
En la reunión se indicó que el país obtuvo «la victoria inicial en sus tres duras batallas» contra los grandes riesgos, la pobreza y la contaminación este año, y que se fijarán esfuerzos para el 2019.
China se apegará al desapalancamiento estructural, evitará la volatilidad financiera anormal y manejará apropiadamente los riesgos de deuda gubernamental local. Las áreas en extrema pobreza y los grupos especiales recibirán más apoyo del gobierno.
Aunque se realizarán mayores esfuerzos y habrá más aportes en el control de la contaminación, los departamentos de gobierno deben tomar en consideración todos los factores y ayudar a las empresas a encontrar soluciones. Fin