El juicio por soborno, malversación y abuso de poder de Bo Xilai fue abierto, transparente y legal, además de que los procedimientos se concentraron en los hechos, la evidencia y la ley.
El juicio por soborno, malversación y abuso de poder de Bo Xilai fue abierto, transparente y legal, además de que los procedimientos se concentraron en los hechos, la evidencia y la ley.
El juicio realizado del 22 al 26 de agosto en el Tribunal Popular Intermedio de Jinan en la provincia de Shandong, en el este de China, mostró una vez más la postura clara de China y su determinación para combatir la corrupción con el estado de derecho, se indicó en un comentario que el Diario del Pueblo, el principal periódico del Comité Central del Partido Comunista de China (PCCh), publicará el martes.
El comentario indica que el manejo del caso, desde la expulsión de Bo del PCCh y su exclusión de cargos públicos hasta su transferencia a los órganos judiciales para atender el caso de forma abierta y transparente, fueron llevados a con apego al estado de derecho desde el comienzo.
Los principios y normas legales fueron respetados. El pensamiento del PCCh de combatir la corrupción fue planteado de forma contundente durante el proceso judicial en el país.
Durante la audiencia, el tribunal de Jinan permitió a periodistas y a la gente en general formar parte del público para escuchar el caso. Los medios noticiosos cubrieron el evento de manera adecuada y oportuna.
El tribunal exploró de forma activa la transparencia judicial, como cuando un vocero del tribunal se dirigió a los medios durante los aplazamientos y con la apertura de una cuenta oficial de microblog para ofrecer transmisiones en tiempo real del proceso en texto.
El tribunal también garantizó al acusado sus derechos de litigio y, durante la audiencia de cinco días, el acusado y sus abogados defensores aplicaron con plenitud sus derechos de procedimiento, como la presentación y el cuestionamiento de la evidencia y la defensa de sus opiniones.
En particular, en una audiencia anterior al juicio celebrada el 14 de agosto, el tribunal escuchó los puntos de vista tanto del fiscal como de la defensa en torno a la jurisdicción del caso, la evasión, el juicio, la presencia de testigos y la exclusión de evidencia ilegal.
En partes clave del juicio, el tribunal convocó a los testigos, de conformidad con la exigencia de mejorar el procedimiento judicial y de garantizar los derechos de litigio del acusado consagrados en la enmendada Ley de Procedimiento Penal de China.
Para probar los tres cargos presentados por los fiscales, el tribunal investigó una gran cantidad de evidencia siguiendo de manera estricta los procedimientos judiciales. Esto muestra la búsqueda de un concepto judicial fiel a los hechos y leyes, tanto en el procedimiento cono en la justicia sustancial.
El inquebrantable combate a la corrupción ha sido una demanda constante del PCCh. Tanto la disciplina como las leyes del partido pueden castigar a los personajes corruptos.
La esencia de la corrupción es el abuso del poder, por lo que la clave para combatirla es limitar y supervisar el poder a través de los sistemas o combatir la corrupción a través del marco legal, indica el comentario.
Una serie de recientes casos de corrupción muestran que quien cometa un delito será castigado conforme a la ley.
«Sólo cuando combatamos la corrupción con una mentalidad legal, la gente sentirá la imparcialidad y la justicia en todos y cada uno de los casos legales», señala el comentario, e indicó que sólo de esta forma la mentalidad «del privilegio especial» será fundamentalmente contenida. Fi