Wen Jiabao afirmó que la tasa del crecimiento económico todavía está dentro del alcance del objetivo establecido a principios de este año, pero advirdió que el rebote económico del país asiático todavía no se ha estabilizado y que los tiempos de apuro económico podrían continuar durante un tiempo.
(SPANISH.CHINA.ORG.CN) – En el año 1992, Deng Xiaoping inició una gira por varias ciudades del sur de China con el fin de mostrar el apoyo institucional a las reformas que, de forma pionera, esas ciudades estaban emprendiendo. Aquel viaje de Deng fue el símbolo más potente del impulso de la transformación económica que ha vivido China durante las últimas décadas.
Al igual que entonces, China y su economía se hallan ahora en una encrucijada. Tras la publicación de varios datos estadísticos que apuntan a una desaceleración del crecimiento, la transformación del modelo económico del país resulta más pertinente y necesaria que nunca con el fin de mantener la estabilidad económica y social. Por ello, varios líderes chinos se han embarcado en una serie de “viajes de inspección” para mostrar el determinado apoyo del gobierno a la transformación del modelo económico chino.
En un discurso pronunciado durante una gira de inspección en la provincia suroccidental china de Sichuán entre el viernes y el domingo, el primero minsitro chino, Wen Jiabao, huyó del alarmismo y afirmó que la economía china está creciendo a un ritmo más lento pero más estable.
«La tasa del crecimiento económico todavía está dentro del alcance del objetivo establecido a principios de este año, y las políticas de estabilización han funcionado», señaló el premier chino.
En marzo de este año, el país redujo su objetivo de crecimiento del producto interior bruto (PIB) para 2012 hasta el 7,5 por ciento desde el 8 por ciento previo ante la persistente depresión económica en los Estados Unidos y la creciente crisis de deuda registrada en la Unión Europea (UE).
Lastrado por la débil demanda exterior y por las medidas gubernamentales para enfriar el sector inmobiliario, el crecimiento del PIB del país asiático se ralentizó hasta un 7,6 por ciento en el segundo trimestre, el nivel más bajo en tres años.
Wen dijo que los fundamentos económicos de China se mantienen en buena forma, y que el país todavía cuenta con un enorme potencial de crecimiento, como la abundante cosecha de verano, el mecanismo de enfriamiento de la inflación y los crecientes ingresos. Sin embargo, advirdió que el rebote económico del país asiático todavía no se ha estabilizado y que los tiempos de apuro económico podrían continuar durante un tiempo.
En la segunda mitad de este año, el gobierno chino «aumentará los esfuerzos para planear y ajustar sus políticas, además de hacer que estén más acordes con los objetivos y sean más cautas y efectivas», manifestó Wen.
El gobierno combinará la estabilización de la inversión con el cumplimiento de los planes de desarrollo a medio y largo plazo, además de promover la urbanización y la modernización agrícola, mejorar la calidad de vida del pueblo, reformar las industrias, explorar los mercados emergentes e impulsar la inversión privada, afirmó el premier chino.
Wen agregó que se deben hacer más esfuerzos para ahondar en las reformas de la distribución de los ingresos, incrementar los ingresos de la ciudadanía y mejorar las redes sociales, además de crear más empleos, especialmente para los jóvenes recién graduados.
Al igual, Li Keqiang, viceprimer ministro, quien oficiosamente es considerado el candidato con más opciones de relevar a Wen en la presidencia del Consejo de Estado, visitó durante el fin de semana la provincia central de Hubei, donde afirmó: “China debería atenerse al principio general de buscar el crecimiento y mantener la estabilidad, esforzándose por expandir el consumo doméstico para estabilizar el crecimiento económico”.