La falta de información oficial sobre la agresión y la negativa de los funcionarios locales a hablar con los medios han generado acusaciones de indiferencia hacia las víctimas. Algunos funcionarios no se encontraban disponibles mientras otros habían sido vistos jugando con sus móviles.
(SPANISH.CHINA.ORG.CN) – Las heridas causadas el pasado viernes a 22 niños de una escuela de la provincia china de Henan por un hombre armado con un cuchillo, ha reabierto el debate sobre la seguridad en las escuelas, informó este lunes el periódico Shanghai Daily.
El de la pasada semana es el tercer ataque con arma blanca que se registra en escuelas del centro del país en lo que va de año, pues el mes anterior un estudiante de 18 años fue herido de muerte por un desconocido que lo atacó en la puerta del colegio y otro escolar de 17 fue asesinado por un compañero de clase en el patio de su escuela en octubre.
Los tres centros de enseñanza en los que ocurrieron estos hechos se encuentran en el distrito de Guangshan, provincia de Henan, indicó la víspera la agencia oficial de noticias Xinhua.
Los padres dijeron a los reporteros que nadie podía entrar en la escuela primaria del poblado de Chenpeng, escenario de la más reciente agresión y que no había ningún guardia en la puerta.
Sin embargo, un funcionario del centro, de apellido Cao, comentó que las puertas habían sido cerradas durante 24 horas y rechazó mostrar a los periodistas el video de vigilancia, porque el director de la escuela, que era la persona autorizada para hacerlo, no se encontraba en esos momentos.
“El agresor irrumpió en el interior del edificio y corrió escaleras arribas, pero nuestros guardias de seguridad consiguieron detenerlo”, aseguró. “No pudo entrar en ninguna clase y ningún estudiante resultó herido allí”.
Algunos estudiantes aseguraron, en cambio, que fueron heridos en su aula y que los profesores llegaron muy tarde para detener el ataque. “El hombre rompió la puerta, destrozó la ventana e irrumpió en nuestra clase”, contó un chico.
Cao afirmó que los estudiantes habían sido heridos en el patio. “Quizás algunos de los lesionados regresaron luego a sus aulas”.
Las primeras versiones apuntaban que algunos habían sido agredidos cuando llegaban a clases.
El atacante, Min Yingjun, de 36 años, se encuentra bajo la custodia de la policía. Algunos de los pobladores que le conocen declararon a los medios de comunicación que piensan que es un enfermo mental. Tiene mal genio y tendencia a la violencia.
Según el Southwest Metropolitan Daily, a Min se le diagnosticó epilepsia cuando tenía 16 años y su padre dijo que la salud mental de su hijo se había deteriorado este año y con frecuencia salía corriendo y no podíamos encontrarlo.
La falta de información oficial sobre la agresión y la negativa de los funcionarios locales a hablar con los medios han generado acusaciones de indiferencia hacia las víctimas.
Un despacho de Xinhua señala que algunos funcionarios no se encontraban disponibles mientras otros habían sido vistos jugando con sus móviles. En tanto, una conferencia de prensa que estaba programada para el día después del ataque fue cancelada.
El procedimiento de los funcionarios ha sido comparado con la trágica matanza de 27 personas (20 de ellos niños) que tuvo lugar el mismo viernes en Connecticut, Estados Unidos, cuando un tirador irrumpió en una escuela y comenzó a disparar indiscriminadamente contra estudiantes y profesores.
“Hay muchos detalles en Internet sobre el incidente de Estados Unidos, mientras nuestros funcionarios intentan bloquear por todos los medios cualquier información y rechazan conceder entrevistas sobre lo sucedido aquí”.
Siete de los estudiantes de Chenpeng han tenido que ser trasladados a hospitales mejor equipados debido a la gravedad de sus lesiones.