BEIJING, 8 dic (Xinhua) -- Al menos dos millones de vehículos privados han sido retirados de las calles de la capital china gracias al plan de respuesta de emergencia puesto en marcha por las autoridades municipales tras su primera alerta roja por esmog.
BEIJING, 8 dic (Xinhua) — Al menos dos millones de vehículos privados han sido retirados de las calles de la capital china gracias al plan de respuesta de emergencia puesto en marcha por las autoridades municipales tras su primera alerta roja por esmog.
Una neblina grisácea ha cubierto hoy martes el cielo de Beijing, que ha anunciado su alerta más grave por esmog basada en el sistema de cuatro niveles de polución. La alerta fue emitida a las 07:00 horas y seguirá activa hasta las 12:00 del jueves.
El martes por la mañana la densidad media de partículas PM2.5 excedía los 234 microgramos por metro cúbico en las áreas del centro urbano.
Siguiendo la alerta, se han cerrado las escuelas y se ha suspendido el trabajo en los lugares de construcción al aire libre, y las fábricas han tenido que cesar su funcionamiento. Beijing también ha cerrado varias secciones de su red viaria para reducir el tráfico.
La prohibición de tráfico, basada en los números de matrícula pares-impares, sacará de las calles al menos dos millones de vehículos privados. Además, el 30 por ciento de los automóviles gubernamentales están sujetos a limitación de desplazamiento.
Las autoridades de tráfico de la capital trabajaron toda la noche para garantizar que el sistema de transporte público pueda acomodar hoy martes a todos los pasajeros extra. Se han añadido más de 840 autobuses, y a las 10:00 horas también había 53 trenes subterráneos más repartidos por las 15 líneas urbanas.
Se ha aconsejado a los jardines de infancia y las escuelas de primaria y secundaria que suspendan sus actividades, aunque algunos profesores han acudido igualmente en apoyo de aquellos estudiantes que han preferido asistir a clase a pesar de la mala calidad del aire.
Aunque algunos estudiantes estaban contentos por no tener que ir al colegio, otros opinaban que el esmog no es nunca una buena noticia.
«Preferiría ir a clase en un día soleado que quedarme en casa para no respirar aire sucio», dijo Li Yue, un estudiante de quinto grado de la escuela Cuiwei de educación primaria en el oeste de Beijing.