«Teniendo en cuenta las tendencias económicas actuales, no hay ningún problema para que China alcance la tasa media de crecimiento económico del 7 por ciento al final del periodo del XII Plan Quinquenal», apuntó Xu Lin, director del Departamento de Planificación de Desarrollo subordinado a la CNDR, en una conferencia de prensa celebrada en Beijing. 

China registró una tasa de crecimiento económico del 7,7 por ciento en 2013, la misma que el año anterior, mientras que su producto interior bruto totalizó 56,9 billones de yuanes (9,3 billones de dólares), según los datos difundidos por el Buró Nacional de Estadísticas (BNE). 

La tasa fue inferior al 9,2 por ciento registrada en 2011, el primer año del plan quinquenal, pero es un resultado satisfactorio al tener en cuenta el complejo ambiente internacional y las incertidumbres en medio de la recuperación económica global. 

«El comportamiento económico de China se estabilizó el año pasado a pesar de las presiones negativas tanto en el país como en el extranjero», señaló el lunes un funcionario del BNE. 

El portavoz de la CNDR, Li Pumin, anunció que China seguirá aplicando una política fiscal activa y una política monetaria estable este año. 

Según una nota entregada en la ocasión, la inversión constituía una importante fuerza motriz para la economía en 2013, ya que contribuyó al 50,4 por ciento del crecimiento económico, 3,3 puntos porcentuales más que en 2012. 

Entre tanto, la inversión privada, apoyada por las políticas favorables, aumentó un 23,1 por ciento respecto al año anterior. 

En la rueda de prensa, la CNDR reveló que el país continuará haciendo un buen uso de la inversión para promover el desarrollo económico y mantenerla en una escala racional con una estructura optimizada. 

Además, dijo que la inversión del gobierno central se enfocará este año en áreas menos atractivas para el capital privado, como viviendas subvencionadas, construcción en las zonas rurales, importantes proyectos de infraestructura, bienestar social e innovación.

Por otra parte, se elaborarán más directrices específicas para el capital privado y se planearán lanzar proyectos de inversión en finanzas, petróleo y gas, energía eléctrica, ferrocarriles, telecomunicaciones, recursos y servicios públicos. Fin