(SPANISH.CHINA.ORG.CN)-La NASA anunció el lunes haber descubierto fuertes evidencias de la existencia de flujos de agua en Marte.

Aunque algunos se mantienen escépticos, las afirmaciones de la NASA han mostrado un serio progreso en la exploración científica.

Estados Unidos ha enviado más de 20 naves espaciales a Marte desde 1964, de las cuales, varias sondas han aterrizado en el planeta rojo. El Curiosity aún se encuentra recorriendo Marte y enviando información. La NASA está dejando a los otros competidores espaciales muy atrás.

La visión de largo alcance de la NASA y sus descubrimientos han satisfecho la curiosidad y logrado el respeto del mundo. Al mismo tiempo, sus hallazgos provocan una sensación de urgencia.

China fue el tercer país en enviar un astronauta al espacio. También envió la sonda Conejo de Jade a la superficie de la luna.

Sin embargo, mientras que Estados Unidos ha estado realizando inspecciones cercanas de casi todos los planetas del sistema solar, la sonda marciana de China, Yinghuo 1, perdió contacto antes de dejar la órbita terrestre. China no tiene telescopios para el espacio profundo, ni aeronaves que vuelen fuera del sistema solar: La brecha con la tecnología espacial estadounidense es grande.

Lo perturbador es que el público chino no tiene una fuerte voluntad para ponerse a la par con la exploración espacial estadounidense. Cuando se trata de las actividades científicas más allá del lanzamiento de satélites, el público pone el grito en el cielo y protesta preguntándose “¿Por qué no se utiliza el dinero para mejorar la vida de la gente común?”.

La Tierra es relativamente pequeña y limitada. La humanidad está destinada a explorar para encontrar más recursos y una esfera de existencia más grande en el futuro.

Quizá sea momento de que China establezca una organización especial para la exploración espacial. Sus tareas no se deben limitar a cosas relacionadas con la Tierra, como el lanzamiento de satélites. Necesita ver el sistema solar, la galaxia y el universo. Debería trabajar en cosas que satisfagan la curiosidad de las personas y que amplíen los horizontes de la humanidad.

Esto no es una necesidad política de resaltar la imagen de China. Es un paso necesario de la modernización de China. El país ha estado siguiendo los pasos de Occidente el siglo pasado. Ahora se necesita sentar la visión de exploración pionera, lista para adentrarse en territorios científicos vírgenes y atreverse a aceptar el riesgo al fracaso.

Pocas personas piensan que el Voyager 1 de Estados Unidos que salió del sistema solar, o el telescopio espacial Hubble, que ha estado en el espacio durante tres décadas, hayan sido inversiones desperdiciadas.

La nación china ya no se satisface con vivir como granjeros que no veían más allá de su propio trozo de tierra y de una familia que criar. Ahora está viendo al espacio.