Zheng Yongnian, director del Instituto de Asia Oriental de la Universidad Nacional de Singapur, dijo en una rueda de prensa celebrada en el marco del Foro de Desarrollo de China 2011, que «en el contexto de la historia mundial, cualquier reforma importante necesita de un gran paso adelante, y en China deberá ocurrir lo mismo».

La reforma de los servicios sociales ha estado en la agenda del gobierno chino desde el periodo del XI Plan Quinquenal (2006-2010), pero la crisis financiera global de 2008 «la secuestró», señaló Zheng.

«El próximo lustro ofrece una oportunidad ideal para llevar a cabo las reformas, ya que el animado crecimiento del país en los últimos años le ha permitido acumular una enorme riqueza, que servirá para financiar la costosa transformación», sostuvo.

Si la puesta a punto es exitosa, el desarrollo de China será elevado a un nuevo nivel. Pero si no llega a ser así, la estabilidad social del país podría verse comprometida, agregó.

De acuerdo con el académico, las políticas de China en materia de vivienda y mercado laboral serán claves para la revisión.

El XII Plan Quinquenal para el Desarrollo Nacional Económico y Social (2011-2015), aprobado por el Parlamento el pasado 14 de marzo, incluye como uno de sus objetivos adoptar un modelo de crecimiento más sostenible, basado en el aumento del consumo interno y la reducción de la dependencia de las exportaciones e inversiones.

«El plan cubre un amplio rango de áreas para servicios sociales, y creo que China avanza en la dirección correcta para dar ese gran paso adelante», concluyó.