¿Está llegando la urbanización demasiado lejos en China? Algunos expertos alertan contra la pérdida de tierras arables y las consecuencias que podría tener para la seguridad del suministro alimentario en el país. También creen necesario ‘desconcentrar’ la población y...
(SPANISH.CHINA.ORG.CN) – La explotación ciega y excesiva del suelo en el proceso de urbanización de China podría contribuir parcialmente a la reducción de las tierras arables del país, lo cual supondría una amenaza para la seguridad alimentaria, según Yang Weimin, secretario general de la Comisión Nacional de Desarrollo y Reforma (CNDR).
“No deberíamos excedernos en la conversión de las tierras agrícolas en terrenos urbanos. La seguridad de la producción de cereales debe ser la prioridad”, afirmó el miembro de la CNDR, el principal planificador económico del país, durante un foro sobre estrategias de urbanización celebrado el pasado fin de semana.
“No todas las zonas necesitan desarrollar masivamente la industrialización y la urbanización. Por ejemplo, deberíamos dejar las principales zonas agrícolas y ecológicas tal y como están actualmente y limitar su urbanizacion”, dijo.
Las zonas urbanas de construcción reciente en China ha crecido un 50 por ciento desde el año 2000, mientras que la población urbana ha aumentado sólo un 26 por ciento durante el mismo periodo. Esto significa que la velocidad de la urbanización del país es casi el doble de la urbanización de la población.
Chen Xiwen, director de la oficina sobre temas rurales del Comité Central del PCCh, afirmo la semana pasada que la tierra arable en China se ha reducido en 8,3 millones de hectáreas en los pasados 12 años, en parte debido a la urbanización.
La pérdida de tierras arables es más grave aún teniendo en cuenta los problemas de producción actuales derivados de la falta de lluvias, lo cual ha llevado a que China tenga que recurrir a las importaciones de ciertos productos como la soja, que obtiene de países como Brasil o Estados Unidos, donde la demanda China ha supuesto toda una revolución en el sector agrícola local.
Reduciendo la concentración urbana
Para Chen, la búsqueda un una alta tasa de urbanización es innecesaria; asegurar un desarrollo equilibrado entre urbanización y desarrollo urbano, así como el desarrollo de las ciudades grandes y pequeñas, es más importante, según el funcionario.
Las conurbaciones o agrupación de ciudades, que se han mostrado poco exitosas en países como Canadá, Australia o Japón, podrían adoptarse de forma efectiva en la urbanización de China, dijo. Cada ciudad dentro de una conurbación podría desarrollar una función única, con industrias específicas, con el objetivo de que las funciones y servicios no estén concentradas en los centros de las grandes ciudades.
Por ejemplo, el centro de Pekín absorbe el 62 por ciento de la población municipal y produce el 70 por ciento de su PIB, lo cual se traduce en problemas de tráfico, por ejemplo. Así lo estima Zhao Hong, economista de la Academia de Ciencias Sociales de China (ACSCh). La contaminación es también otra de las consecuencias.
El traslado de las industrias de la capital, como las manufacturas o la logística, a zonas vecinas no sólo ayudaría a hacer de Pekín una ciudad más funcional, sino también a redistribuir la población, según Zhao.