La previsión de crecimiento del producto interno bruto (PIB) de China para 2015 realizada por UBS se mantiene en el 6,8 por ciento, pues se espera que el apoyo adicional de las políticas y la recuperación de las exportaciones ayudarán a reforzar la debilitada economía, dijo este lunes la compañía de servicios financieros.

«No es previsible que los datos, mejores de lo esperado, de diciembre y del cuarto trimestre del año pasado provoquen nuevas medidas inmediatas significativas de relajación por el momento, pero la primera bajada de tipos podría producirse (alrededor de) en marzo o abril, cuando se informe de un IPC (índice de precios al consumo) y un IPP (índice de precios a los productores) todavía más bajos», indicó el economista jefe para China de UBS, Wang Tao, en una nota de investigación.

Wang añadió que el apoyo de las políticas se intensificará en 2015 con medidas de crecimiento aceleradas en áreas como los precios, la red de seguridad social y la reforma del hukou (registro de residencia) y con más proyectos de infraestructuras.

Una mayor relajación monetaria por la vía de provisiones de liquidez, incluyendo reducciones del coeficiente de reservas requeridas, se espera que compensará la acumulación más lenta de reservas de divisas y también se prevén bajadas del tipo de referencia de al menos 50 puntos básicos (bp, por sus siglas en inglés) para prevenir la subida de los tipos reales, conforme a UBS.

La compañía prevé que el crecimiento del PIB en el primer trimestre de 2015 se seguirá debilitando secuencialmente, arrastrado por la debilidad actual de la construcción y los problemas de financiación relacionados con las infraestructuras.

Se prevé que la economía se recupere en el segundo trimestre, cuando se resuelvan las cuestiones de financiación y las incertidumbres sobre las políticas se reduzcan, al celebrarse en marzo la reunión de la Asamblea Popular Nacional (APN, el máximo órgano legislador chino) en la que se difundirán políticas clave relacionadas con la cuestión.

El crecimiento del PIB de China se situó en el 7,4 por ciento el año pasado, su expansión más débil en los últimos 24 años.