El Gobierno de la República de China esta vez ha adoptado la actitud de insistir en los principios de dignidad, autodeterminación y garantía de la autonomía de la isla de Taiwan, enfatizando que en la actualidad el arreglo más pragmático y factible sería conceder a Taiwan la calidad de observador de la Asamblea Mundial de la Salud.


     A estos efectos, folletos en los idiomas chino, inglés, español y francés han sido distribuidos a la comunidad internacional a través de las diferentes embajadas y oficinas representativas de Taiwan en el extranjero, explicando el porqué Taiwan necesita participar en la Asamblea Mundial de la Salud y las capacidades que tiene Taiwan para contribuir a la OMS.



     En tales folletos Taiwan expresó su complacencia por la decisión de la OMS de aceptar a Taiwan al Reglamento Sanitario Internacional (RSI), pero enfatizó que el RSI se limitaba al aviso y al control de las situaciones epidémicas, pero no incluía los temas relacionados con la salud y el bienestar de la humanidad entera, como la seguridad de los alimentos, el control del tabaco y la prevención y el control de los medicamentos falsificados, ya que todos estos temas requieren la participación de Taiwan para poder asegurar la integración completa al sistema sanitario mundial.



     Tomando como ejemplo la investigación y el desarrollo de vacunas contra la influenza aviar, los folletos indicaron que Taiwan había empezado la investigación y el desarrollo de vacunas contra la influenza aviar en el año 2005, y que en la actualidad había desarrollado una vacuna que Taiwan estaba listo para ofrecersela a la comunidad internacional; sin embargo, debido a la rapidez de las variaciones del virus, a menos que Taiwan pudiese obtener las últimas informaciones sobre las variaciones del virus de la influenza aviar a través del mecanismo internacional dirigido por la OMS, la vacuna desarrollada por Taiwan no podría ofrecer una protección completa.



     La Cancillería de la República de China señaló que si Taiwan pudiera convertirse en observador de la Asamblea Mundial de la Salud y luego asistir a las futuras reuniones entre gobiernos coordinadas por la OMS, podría conseguir las últimas informaciones al respecto, lo que le ayudará a investigar y desarrollar vacunas de la influenza aviar independientemente, utilizando sus propias técnicas médicas; eso será la mejor prueba de que, en calidad de observador de la Asamblea Mundial de la Salud, Taiwan podrá beneficiar a la comunidad internacional.

     La Cancillería dijo que el otorgamiento de la calidad de observador a Taiwan no contendría ninguna implicación política y correspondería a la realidad actual y aseguraría sus derechos de participar plenamente en todos los mecanismos, reuniones y actividades de la OMS, todo lo cual sería un arreglo favorable no sólo para Taiwan, sino también para la misma OMS y para la comunidad internacional entera.ENDITEM(Ramón Huang)