Taipei, septiembre 7 (CNA) Para implementar la Convención sobre la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación contra la Mujer (CEDAW, siglas en inglés), el Gobierno revisará todos los reglamentos que estén en violación de esa convención para finales de este año, anunció el Gabinete de la República de China (Taiwán).
Taipei, septiembre 7 (CNA) Para implementar la Convención sobre la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación contra la Mujer (CEDAW, siglas en inglés), el Gobierno revisará todos los reglamentos que estén en violación de esa convención para finales de este año, anunció el Gabinete de la República de China (Taiwán).
El Gobierno de Taiwán promulgó la CEDAW en junio del 2011, empezando a implmentarla desde el año 2012.
El Yuan Ejecutivo (Gabinete) dijo que había examinado más de 30.000 reglamentos desde ese año, descubriendo 228 reglamentos en violación de la convención.
Las violaciones estuvieron divididas en siete categorías, incluyendo el estereotipo de género, restricciones sobre derechos de trabajo de las mujeres, limitaciones en los derechos de propiedad de las mujeres, el trato diferente entre hombres y mujeres, violación de la autonomía física y de los derechos reproductivos de las mujeres, y demasiada énfasis en la familia patriarcal.
La última categoría incluye también a todos los otros tipos de discriminación, tales como las condiciones diferentes de trabajo basadas en los géneros y la exigencia a las empleadas a vestir faldas cortas o falda ceñida.
La CEDAW fue adoptada en el 1979 por la Asamblea General de las Naciones Unidas, entrando en vigor en septiembre de 1981.
Si bien Taiwán no es un miembro de la ONU, el Yuan Ejecutivo ratificó la CEDAW en el año 2007, adoptando la convención como una ley doméstica en el 2011.
El Gabinete completó su segundo informe nacional respecto a la implementación de la CEDAW en el año 2013, invitando a cinco expertos internacionales en derechos de mujeres a venir a Taiwán para examinar el mencionado informe en junio de este año.
La semana pasada, la legisladora del opositor Partido Democrático Progresista (PDP), Yu Mei-nu, y otros activistas criticaron al Gobierno, sosteniendo que los funcionarios respectivos no habían hecho ninguna manifestación alusiva al público en general a más de dos meses después de haber estado reunidos con esos expertos.