(SPANISH.CHINA.ORG.CN) – En el ámbito de las grandes agencias de ‘rating’ globales, dedicadas a evaluar la deuda soberana de los Estados y otros organismos, occidente ha llevado la voz cantante. Ahora, una agencia de ‘rating’ china aumenta su voz en el ámbito financiero global en un momento en el que la credibilidad de estas agencias está en cuestión por no haber sido capaces de prever la crisis financiera global.

Dagong Global Rating Co. Ltd. fue creada en 1994 cuando la economía china comenzaba a reestructurarse. La salida masiva de empresas chinas al exterior ha relanzado la labor y pertinencia de esta agencia para las compañías del país asiático, como contrapunto al punto de vista de las agencias de ‘rating’ norteamericanas y europeas.

De esta forma, el mercado hasta ahora dominado por Standard & Poor’s, Moody’s (EEUU) y Fitch (europea) deberán competir también con un homólogo chino. En declaraciones a la agencia AFP, el presidente de la agencia china, Guan Jianzhong, criticaba la labor de las grandes agencias, cuyas evaluaciones, según él, “descansan sobre una ideología, unos valores, y en los intereses estadounidenses”.

Dagong saltó a la palestra sobre todo cuando a comienzos de noviembre el gobierno norteamericano anunció la salida al mercado unos 600 mil millones de dólares como medida para reactivar la economía. En esa coyuntura, la agencia degradó la calificación de la deuda estadounidense de ‘AA’ a ‘A+’, por considerar que la capacidad de reembolso de Washington respecto a sus deudas estaba deteriorada y que la administración norteamericana tomaba medidas que perjudicaban a sus acreedores.

El gobierno chino es el principal acreedor de Estados Unidos, con 900 mil millones de dólares en bonos del tesoro norteamericano. El resto de agencias otorgan a la deuda de Estados Unidos sus respectivas máximas calificaciones (AAA).

Dagong subraya su carácter de empresa totalmente privada y su independencia con respecto a cualquier instancia gubernamental. Sin embargo, su imparcialidad y credibilidad están aún por edificar, al menos de cara a los países occidentales.

Para los expertos, la diversidad de puntos de vista en este ámbito es algo muy positivo, sobre todo cuando las calificaciones emitidas por estas agencias pueden afectar muy seriamente la credibilidad financiera de los estados. No obstante, esta agencia ‘emergente’ necesitará tiempo para adquirir un prestigio global.