La discusión fue organizada por el Ministerio de Seguridad Pública de China y en ella participaron representantes de la Fiscalía Popular Suprema de China, así como de los ministerios de Supervisión, Relaciones Exteriores y Justicia. De la parte estadounidense asistieron el Departamento de Justicia y el Servicio de Ingresos Internos del Departamento del Tesoro.

El encuentro, destinado a fortalecer los esfuerzos para capturar a fugitivos chinos que se ocultan en Estados Unidos, se enfocará en las leyes y entrega de evidencia y concluirá el viernes.

China ha reforzado su búsqueda de prófugos que cometieron delitos económicos, incluidos muchos funcionarios sospechosos de corrupción. En la operación «Caza de zorros 2014» 680 de esos delincuentes fueron llamados a cuentas.

Sin embargo, China aún tiene que firmar un pacto de extradición con Estados Unidos o Canadá, dos sitios muy atractivos para que se oculten los fugitivos de ese tipo de delitos.

El Ministerio de Seguridad Pública dijo que sostendrá más conversaciones con las autoridades judiciales estadounidenses este año, incluido el Buró Federal de Investigación (FBI) y la autoridad de inmigración y aduanas.