BEIJING, 22 ago (Xinhua) -- El presidente estadounidense, Barack Obama, visitará China a mediados de noviembre, anunció hoy sábado el nuevo embajador de Estados Unidos en China, Jon Huntsman.
«Muchas cosas están sucediendo este año en las relaciones Estados Unidos-China. El presidente Obama visitará China a mediados de noviembre», dijo en la tarde de hoy a los periodistas el nuevo jefe de la representación diplomática de EEUU en China.
Ni Washington ni Beijing han anunciado la fecha exacta de la visita de Obama, sin embargo, ambos países emitieron una declaración después de la primera reunión de sus presidentes en abril en Londres, anunciando que éste visitaría China en el segundo semestre de este año.
Hablando en inglés y chino en su residencia en el centro de Beijing, Huntsman describió la relación Estados Unidos-China como «la más importante del mundo».
«Para finales del año seguramente estaremos en mejor forma que nunca antes entre Estados Unidos y China», afirmó el republicano, de 49 años, flanqueado por su esposa y sus tres hijas, una de ellas de origen chino, quienes también llegaron a Beijing en la noche de ayer viernes.
Huntsman fue nombrado por Obama para servir como embajador en China en mayo, y confirmado por el Senado de su país a principios de agosto.
«Tengo la esperanza, y la confianza, de que las relaciones China-Estados Unidos serán más fuertes que nunca», manifestó el embajador, y subrayó que los dos países «son concientes de los potenciales desafíos que podrán enfrentar en la construcción de un mejor mañana».
La experiencia de Huntsman con China empezó a comienzos de los años 80, cuando visitó el país mientras trabajaba como asistente en la Casa Blanca durante la administración de Ronald Reagan.
Desde entonces, en varias ocasiones encabezó misiones comerciales al país asiático, y en 1999 adoptó una niña de la oriental ciudad de Yangzhou.
Antes de ser seleccionado por Obama como jefe diplomático en China, Huntsman se desempeñó como embajador en Singapur, y fue además gobernador del estado de Utah desde 2005 hasta cuando fue confirmado por el Senado el pasado día 11.
Su predecesor, Clark Randt, fue el embajador que más tiempo ha servido en China desde cuando los dos países forjaron relaciones diplomáticas, en 1979.
Huntsman dijo que en lo alto de su lista de prioridades estarán «ayudar a tender los cimientos para un crecimiento sostenible en la región, y la economía mundial».
El diplomático hizo un llamado a que las dos naciones «trasciendan los desacuerdos, dificultades y retos», y trabajen «por la prosperidad de sus pueblos, la paz y la seguridad a ambos lados del Pacífico».
El enfoque de su período al frente de la embajada estadounidense en Beijing será «llevar la relación China-EEUU a un nuevo nivel», aseguró.
«Un nuevo nivel», aclaró el embajador, «se refiere específicamente a los esfuerzos conjuntos de China y Estados Unidos en materia de cambio climático, energía, seguridad regional, y economía global».
«Si hacemos frente exitosamente a todos esos asuntos, por definición, llevaremos nuestra relación a un nuevo nivel», puntualizó.