China tiene prisa en acelerar el desarrollo y potenciar su poderío y le es preciso contar con las asistencias económicas y tecnológicas y canales de exportación que EEUU puede ofrecer. EEUU procura reforzar sus intereses en el mundo sujetando a China mediante Taiwán y controlando a Corea del Norte y Japón mediante China. En ese contexto, las relaciones bilaterales no se irán deteriorando demasiado.