Existe un gran potencial sin explotar en el comercio entre España y China, según alta funcionaria española

In Noticias, Política exterior by Xulio Ríos

MADRID, 15 dic (Xinhua) — La mejora de las relaciones entre España y China ha contribuido al crecimiento de la economía y el comercio entre las dos partes, pero sigue habiendo espacio para su expansión, dijo Xiana Méndez, secretaria de Estado de Comercio de España, en entrevista con Xinhua.

Si bien Méndez destacó que los flujos económicos y comerciales entre España y China han experimentado un crecimiento considerable durante los últimos años como consecuencia del mayor fortalecimiento en las relaciones comerciales entre los dos países, la secretaria de Estado apuntó que estas aún disponen de un amplio margen de mejora, tanto en volumen como en composición, ya que, a pesar de la tendencia positiva no reflejan el peso de ambas economías.

Méndez afirmó que el pasado año los bienes españoles con mayor volumen de exportación al mercado chino fueron los agroalimentarios (45 por ciento), las semimanufacturas (21 por ciento) y las materias primas (13 por ciento).

Entre las exportaciones destacó, por su elevado protagonismo, la carne de porcino, donde España se posiciona como primer suministrador mundial a China, con un 31 por ciento de sus exportaciones totales al país asiático y un 70 por ciento de las del sector agroalimentario; los minerales de cobre y sus concentrados; los despojos de animales; los componentes y accesorios de automoción y los medicamentos.

Sin embargo, indicó, existen grandes perspectivas y oportunidades para las empresas españolas en China, fruto de la enorme variedad y alta calidad de sus bienes en sectores que abarcan desde productos agroalimentarios gourmet y con certificación orgánica hasta maquinaria y herramienta de alta gama, bienes de consumo (como la moda sostenible o los cosméticos), productos químicos y farmacéuticos o componentes y accesorios en los sectores de movilidad eléctrica y de tecnología medioambiental.

En el ámbito de los servicios, la contratación pública y la inversión también existe un gran potencial sin explotar, señaló la secretaria de Estado, y destacó que las empresas españolas gozan de una amplia experiencia internacional en sectores como infraestructura de transporte, agua y residuos y energías renovables e ingeniería, entre otros, y han mostrado un enorme interés en poder acceder a proyectos en China.

«China no debe obviar los beneficios que España puede ofrecer en todos estos sectores. Por ello, es necesario poner el foco en nuestras relaciones de futuro, centrándonos en la búsqueda de oportunidades que permitan aprovechar sinergias y potencialidades entre nuestros respectivos países», afirmó Méndez.

«China es un país estratégico desde el punto de vista económico y comercial, debido al enorme crecimiento que tiene hoy y, sobre todo, el que se estima que tenga en el futuro (representando un 20 por ciento del PIB mundial en 2050)», aseveró Méndez, y expresó su esperanza de que el auge de las exportaciones siga mostrando una tendencia creciente en el futuro a través de sectores de gran valor añadido y que podrán ser mutuamente beneficiosos.

La cooperación entre los sectores empresariales de las dos partes es de gran importancia, ya que ha permitido a ambos países beneficiarse en el corto plazo de las sinergias de esta relación y progresar en el desarrollo económico y bienestar social, acomodando las exportaciones e inversiones a las necesidades concretas de su contraparte en cada época, recordó la secretaria de Estado.

«Todavía existe un gran margen para profundizar en la colaboración empresarial bilateral dada la complementariedad de nuestras empresas en algunos de los campos mencionados, y de mejorar el acceso al mercado para bienes y servicios. A nivel institucional estamos comprometidos en mantener un canal de diálogo abierto con China y trabajar conjuntamente para reforzar estos aspectos, y que las perspectivas a futuro sigan siendo tan favorables como lo han sido en estos últimos años», detalló la alta funcionaria.

«China ha sido para España un motor clave de la recuperación post-COVID. Prueba de ello es la posición que ocupa China como destino estratégico de nuestras exportaciones, situándose entre los 10 primeros países de destino, y superando en 2020 los 8.000 millones de euros por primera vez, con un incremento del 20 por ciento. Crecimiento que se mantiene a un ritmo similar en los meses de enero a septiembre de 2021 (16,50 por ciento con respecto al mismo periodo de 2020)», destacó la secretaria de Estado.

«El comercio de servicios aumenta incluso más deprisa que el de mercancías. Según una encuesta del segundo trimestre de 2021, sin contar el turismo, nuestras exportaciones crecieron un 60 por ciento con respecto a 2018; con 3.500 empresas exportadoras y representando el 1,75 por ciento del total de nuestras exportaciones de servicios en 2020», precisó Méndez, señalando que estas cifras muestran que China supone un importante motor de crecimiento para algunas empresas españolas.

También recalcó que el comercio de bienes por tren entre España y China se ha incrementado de manera considerable, y su flexibilidad en el tipo de mercancías a trasladar, el incremento de frecuencia semanal y su bajo impacto medioambiental lo posicionan como una alterativa de medio de transporte seguro y eficiente, tal y como se demostró durante el suministro de material médico a España desde China durante la primera fase de la pandemia.

La secretaria de Estado señaló que pese al impacto coyuntural que ha tenido la pandemia sobre las operaciones comerciales globales, las relaciones entre los exportadores españoles y sus agentes y distribuidores en China se siguen mostrando sólidas, permitiendo la continuidad de los canales de comercialización y distribución.

En los últimos 20 años, el comercio bilateral entre España y China ha crecido un 712 por ciento, las exportaciones españolas hacia China han aumentado un 1.377 por ciento, y las importaciones procedentes del país asiático a España se han incrementado un 522 por ciento. Incluso durante la pandemia, el comercio entre los dos países está aumentando.