BEIJING, 6 jul (Xinhua) — Beijing y Berlín, aunque están separadas por miles de kilómetros, están desafiando su distancia geográfica para forjar unas relaciones cada vez más estrechas.

El cansancio del vuelo de cerca de medio día entre las dos capitales no puede impedir que Angela Merkel empiece este fin de semana su séptimo viaje a China como canciller alemana.

Durante su estancia de cuatro días, Merkel se reunirá con el presidente chino, Xi Jinping, y con el primer ministro, Li Keqiang, quienes ya han visitado Berlín desde que asumieron sus cargos el año pasado.

La frecuencia de las visitas mutuas de alto nivel es un claro indicador de la cercanía entre Beijing y Berlín y del nivel de importancia que ambos países conceden mutuamente.

Es justo decir que las relaciones China-Alemania están en el mejor momento de la historia, y se han caracterizado por la cooperación pragmática entre dos pesos pesados económicos.

Vale la pena apuntar algunas cifras básicas. Alemania es ahora el mayor socio comercial de China en Europa, mientras que China es el más grande de Alemania en la región Asia-Pacífico. El comercio entre ambos alcanzó los 161.600 millones de dólares estadounidenses el año pasado, lo que representa cerca de un tercio del total entre China y la Unión Europea (UE).

Un hecho que se encuentra detrás de estas cifras extraordinarias y que permanece escasamente conocido es que tanto China como Alemania son potencias manufactureras y líderes mundiales en exportación, pero en la mayoría del tiempo ambos han conseguido evitar una guerra comercial y se han mantenido juntos a favor del libre comercio.

Merkel se ganó el aplauso de China el año pasado por su oposición a la investigación comercial de la UE sobre los equipamientos de telecomunicaciones móviles chinos.

La inusual acción compartida entre las dos potencias exportadoras está profundamente enraizada en su complementariedad económica.

Como expuso Xi durante su visita a Berlín en marzo, la cooperación China-Alemania es una combinación perfecta del mercado chino y la tecnología alemana y una alianza entre la velocidad china y la calidad alemana.

Cuando las empresas alemanas están deseosas de vender sus sofisticados productos al creciente mercado chino, China está igualmente ansiosa por aprender del Made-in-Germany para su propio ascenso económico.

En la visita Merkel estará acompañada por una delegación empresarial de alto perfil, que incluye a directivos de Siemens, VW, Airbus, Lufthansa y Deutsche Bank, todas ellas marcas familiares para los chinos.

Hay una gran expectación en que la canciller alemana encuentre su actual viaje más fructífero que nunca y lleve a su país a un paso más cerca de China.