Existen diferentes modelos de desarrollo que se están perfilando a nivel mundial, con la finalidad de conseguir la hegemonía y el control de los mercados. Sin duda, el caso de China es muy interesante, un país con la mayor población del planeta y a su vez con el mayor crecimiento económico sostenido en los últimos años. Su economía socialista de mercado ha logrado afrontar las adversidades y adaptarse a los cambios políticos necesarios; convirtiendo la interacción desarrollo económico y político en los bastiones del modelo chino. A lo largo del artículo, se expone el desarrollo sustentable en China de acuerdo a las fortalezas y los problemas que actualmente deben enfrentar, para garantizar la sustentabilidad en las próximas décadas y superar un modelo Neo-Malthusiano que se está gestionando.