(ELECCIONES TAIWAN 2024) Un suicidio azul Xulio Ríos es asesor emérito del Observatorio de la Política China

In Análisis, Taiwán by Xulio Ríos

La irrupción formal en la carrera electoral taiwanesa del candidato independiente y magnate Terry Gou ha sacudido las expectativas de las diferentes formaciones, en claro beneficio del oficialista Lai Ching-te. La sombra del suicidio político planea sobre los candidatos no independentistas, especialmente el azul Kuomintang, Hou Yu-ih, y, por supuesto, el propio Gou. Este último viene a fragmentar más a la alicaída oposición y centra el foco de la agenda política en las relaciones a través del Estrecho, uno de los asuntos de mayor conveniencia para el Minjindang o PDP en lugar del balance de su gestión, que ya le valió una seria reprimenda en las elecciones locales de 2022. Las perdió de forma notoria.

Los rumores de que Ko Wen-je había llegado a un acuerdo con el KMT para colaborar en los comicios han sido rotundamente desmentidos. Ko, por delante en las encuestas, rechaza ser el compañero de fórmula de Hou, que va tercero. Calificado de pura invención, lo cierto es que el baile de aproximaciones del KMT, entre Gou y Ko, condiciona el marco de las alianzas y transmite esa sensación de la búsqueda, se diría que desesperada, de un salvavidas. En este marco, el vicepresidente del KMT, Sean Lien, confirmó una conversación con Gou para impedir el lanzamiento de su candidatura. A todas luces, fracasó. Gou no acepta otra cosa que sustituir a Hou, algo inaceptable para el KMT.

La situación de Hou, el naturalmente llamado a liderar la oposición, es complicada. Tras su apabullante victoria en Nuevo Taipei en los comicios de noviembre de 2022, su futuro político lucía brillante. La aceptación de la candidatura presidencial solo unos meses -después sin renunciar a la alcaldía- sugiere ahora una posición incómoda. Lai, por ejemplo, puede exhibir su ciclo de dos mandatos cumplidos al igual que Ko, al frente de la capital Taipéi. El estatus de Hou se asemeja cada vez más al de Han Kuo-yu hace cuatro años, cuando ganó la alcaldía de Kaohsiung, que dejó de lado para competir con Tsai Ing-wen en las presidenciales. Lo acabó perdiendo todo. Ese escenario provoca hilaridad en las diferentes facciones del KMT y bandazos en su estrategia política que desconciertan a su base electoral.

Abrirse camino con propuestas de tipo social, como ha hecho recientemente en materia de salud, puede ayudar a Hou a despejar la bruma y recuperar cierta popularidad en algunos nichos electorales, pero necesitará mucho más para revertir la tendencia general.

Ahora mismo, ni Hou (KMT) ni Gou (independiente) ni Ko (PPT) compiten con Lai (PDP) sino entre ellos mismos, lacerándose mutuamente las expectativas. Los movimientos que puedan darse en las próximas semanas serán decisivos para evitar que la actual deriva culmine en un descalabro que podría llegar a ser dramático para el Kuomintang.